De acuerdo con el Boletín Epidemiológico del Instituto Nacional de Salud, en Colombia se han registrado un total de 790 muertes probables en niños menores de 5 años hasta la semana epidemiológica 37 de 2023. Los motivos principales detrás de estos trágicos números son las infecciones respiratorias agudas (IRA), la desnutrición aguda y las enfermedades diarreicas agudas.
A pesar de que a nivel nacional se observa una disminución en algunas cifras en comparación con años anteriores, varios departamentos y ciudades del país, entre ellos Bajo Baudó (Pizarro), Manaure, Puerto Gaitán, Medellín, Valledupar, Bagadó, Fundación, Montenegro e Ibagué, muestran diferencias significativas en las estadísticas de mortalidad infantil.
El departamento del Chocó es especialmente preocupante. Se está realizando un seguimiento detallado a comunidades indígenas en zonas como río Pavasa, Puerto Samaria y comunidad El Aguacate en Bajo Baudó (Pizarro) debido a un notable conglomerado de posibles muertes por IRA, enfermedad diarreica aguda y desnutrición.
Las comunidades indígenas, específicamente las pertenecientes a las poblaciones Wuanaan y Emberá, enfrentan serios desafíos de salud, lo que demanda la intervención inmediata del Estado y organizaciones aliadas para brindar atención especializada y mitigar estas cifras alarmantes.
Con estos datos en mano, se hace un llamado urgente a las autoridades y a la sociedad en general para que se intensifiquen las medidas de prevención y se refuercen las estrategias de atención en las zonas más vulnerables del país, especialmente en Chocó.
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