Dos años y dos meses después, nada ha pasado con la promesa de las autoridades sobre la reconstrucción de las casas de las más de 80 familias que quedaron sin techo, la noche del 28 de noviembre de 2020.
Un día después de la tragedia, dónde a demás de las pérdidas materiales, fallecieron dos personas; el viceministro y posterior ministro del interior Daniel Palacios, prometió que “en seis meses después” las familias damnificadas recibirían sus viviendas, pero a la fecha ni siquiera se ha plantado la primera piedra.
Cansados de esperar y padecer además el incumplimiento en la entrega de los subsidios de arriendos también prometidos por las autoridades, la mayoría de las familias y por sus propios medios; iniciaron a reconstruir sus casas. De hecho el lugar que se veía desolado después de la tragedia, poco a poco se ha vuelto a poblar, pese a las trabas que según las familias, han recibido por parte de la administración municipal.
Mientras los damnificados del 28 de noviembre se reinventan e intentan retomar sus vidas en medio de la incertidumbre, no dejan de cuestionar la postura del alcalde local, de quien dicen han recibido respuestas confusas y promesas incumplidas.
Dentro de lo acordado por las autoridades para atender a las víctimas del incendio, le correspondía a la administración municipal disponer del terreno y su adecuación para iniciar con la reconstrucción de las viviendas. En la segunda visita del ministerio del interior en marzo del 2021, el alcalde de Riosucio, Conrad Valoyes Mendoza, le mostró al alto funcionario el lugar donde se había definido las obras de reconstrucción, dónde a demas ya se habían invertido recursos en roceria y aparentes estudios.
Para ese mismo año, pero en el mes de diciembre, el mismo alcalde Valoyes, anunció la asignación de los recursos por parte del ministerio de hacienda nacional para las viviendas del 28 de noviembre, previamente diseñadas y aprobadas por las familias.
Paradójicamente el mandatario local en un anunció posterior afirmó no contar con el terreno por un aparente mal entendido con los propietarios del lote donde recordemos ya se le había enseñado al gobierno nacional.
En otra parte de la historia, hace pocos meses Valoyes Mendoza, afirmó ya contar con la documentación del terreno y que se encontraba adelantando el proceso legal para adquirirlo.
Lo único cierto, es que con justas razones, ya las familias no creen en las palabras del alcalde y por eso con todas las dificultades del caso, intentan levantarse de las cenizas cual ave fénix.
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