En medio de una persecución en el Océano Pacífico, a 64 millas náuticas de la boya de mar de Buenaventura, Unidades de la Armada de Colombia interceptaron una embarcación tipo langostera tripulada por dos colombianos y un ecuatoriano, cargada con más de 1,5 toneladas de narcóticos tipo marihuana y clorhidrato de cocaína, en el momento en que se movilizaban de forma ilegal, al parecer hacia un primer punto de acopio en países de Centroamérica. La droga incautada sería comercializada por los narcotraficantes por un valor superior a los 10 millones de dólares.
Información de inteligencia naval y el permanente despliegue de operaciones marítimas contra el tráfico de estupefacientes en el Pacífico colombiano, adelantadas por las Unidades de la Estación de Guardacostas de Buenaventura y Unidades de Superficie de la Fuerza Naval del Pacífico, permitieron detectar la motonave de nombre “La Fuga”, cuando se desplazaba a altas velocidades transportando un cargamento con varios bultos, de forma sospechosa.
Al percatarse de la presencia de las autoridades, los tres sujetos que tripulaban la lancha comenzaron a arrojar los costales al agua, mientras intentaban evadir los controles. Por su parte, las Unidades de la Estación de Guardacostas de Buenaventura iniciaron la operación de interdicción marítima. Tras 20 minutos de persecución la embarcación fue detenida, hallando en su interior 49 costales cargados con 1617 paquetes con drogas ilícitas.
Una vez trasladados a Buenaventura, integrantes del CTI de la Fiscalía realizaron la prueba de identificación preliminar homologada que arrojó positivo para 1540 kilogramos de marihuana y 18 kilogramos de clorhidrato de cocaína. Los tres tripulantes de la motonave fueron capturados y puestos a disposición de la autoridad competente, ante quien deberán responder por el delito de tráfico, fabricación y/o porte de estupefacientes.
De acuerdo con información de inteligencia, el cargamento incautado pertenecería a las disidencias de las FARC, grupo armado organizado residual E-30.