En Riosucio, Chocó, la paciencia poco a poco se está agotando. La frase “el rey de los viáticos”, con la que muchos líderes y habitantes han bautizado al alcalde Juan Moreno Mena, ya no suena como una broma entre vecinos, sino como el reflejo de una inconformidad que crece día tras día. Mientras el mandatario sigue de comisión en comisión, en el municipio siguen acumulándose las necesidades que aún no reciben respuesta.
“No se le ve ni la sombra, eso es viaje tras viaje”, se escuchó entre risas en una de las esquinas del parque del bocachico, pero la risa, dicen algunos, es solo para no llorar. Y es que más allá del humor popular, lo cierto es que muchos habitantes cuestionan los constantes desplazamientos del alcalde, algunos de los cuales según denuncian superarían los cinco días establecidos por la ley para comisiones de servicio dentro del país.
El Departamento Administrativo de la Función Pública lo dice claro: Las comisiones dentro del país no podrán tener duración superior a cinco (5) días, el alcalde debe entregar un informe detallado que justifique el motivo, duración, costos y resultados. Pero, en Riosucio, lo que muchos se preguntan es: ¿dónde están esos resultados?
“De tanto que viaja, uno pensaría que está buscando el Santo Grial del desarrollo, pero aquí seguimos sin ver ni el cofre ni el mapa”, comentó con ironía un ciudadano. A esta preocupación se suma la posibilidad de que la administración gestione un préstamo superior a los 20.000 millones de pesos para avanzar en obras inconclusas como el palacio municipal. Una decisión que está en manos del Concejo y que podría comprometer las finanzas del municipio durante años.
En vez de endeudar al municipio, varias voces señalan que se debería fortalecer la formulación de proyectos ante el Gobierno Nacional, más aún considerando que Riosucio hace parte de los territorios priorizados por los Programas de Desarrollo con Enfoque Territorial (PDET).
Mientras tanto, los días pasan y el municipio parece avanzar a paso de tortuga. Calles deterioradas, servicios deficientes y promesas estancadas contrastan con una agenda de viajes que no para. Lo más preocupante: no hay claridad sobre qué beneficios concretos han traído estas salidas para la comunidad.
En Riosucio, la esperanza aún no se pierde, pero el pueblo pide menos maletas y más resultados. Porque gobernar no es solo andar de comisión en comisión, sino estar presente donde realmente importa: en el territorio y junto a la gente.
Somos Notiriosucio, llámanos o escríbenos al 3218365504.