El municipio de Alto Baudó, ubicado en el departamento del Chocó, Colombia, enfrenta una grave crisis de salud pública tras confirmarse la muerte de 51 menores de edad por desnutrición en los últimos seis meses. El alcalde Ariel Salazar Sarco ha sido el encargado de dar a conocer esta alarmante cifra, destacando que las víctimas tenían edades comprendidas entre los 6 meses y los 7 años.
Ante esta situación crítica, Salazar ha hecho un llamado a las autoridades nacionales, solicitando una intervención urgente que hasta el momento, según sus declaraciones, no ha visto acción concreta. “Nosotros hemos establecido varias reuniones, solicitando la construcción de puestos de salud en sitios estratégicos, así como la posibilidad de erigir un hospital de primer nivel o de baja complejidad en la cabecera municipal”, explicó el alcalde. La necesidad de estas infraestructuras sanitarias se ve exacerbada por la compleja geografía del Chocó, que prolonga el viaje hacia la ciudad de Quibdó a unas 12 horas, durante las cuales pacientes en estado crítico no sobreviven el trayecto.
El alcalde Salazar ha expresado la frustración que representa la limitación de recursos, que apenas alcanzan para atender a la mitad de la población afectada por la desnutrición y otros problemas de salud. A pesar de las restricciones económicas, la administración municipal ha buscado implementar estrategias como brigadas de salud y charlas de salud mental para los padres de familia, con el objetivo de mitigar el impacto de esta crisis.
En medio de esta difícil situación, el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) ha comenzado a intervenir, brindando atención a algunos niños y niñas afectados, lo que ha generado una cierta confianza en la comunidad local. Sin embargo, el alcalde ha remarcado que esta problemática de desnutrición en el municipio no es nueva y ha desafiado soluciones efectivas durante años.
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