Riosucio en crisis/ Descontaron los recursos para el pago de seguridad social de empleados pero la administración saliente deja una deuda de más de 493 millones de pesos en meses atrasados de salud, pensión y ARL. Ni los concejales se salvaron. ¿A dónde fueron a parar estos recursos? El Radar Investiga.
Un reciente informe de “Nuestros Agentes 2024” ha sacado a la luz un escándalo financiero en la administración pasada de Riosucio, Chocó, que pone en entredicho la integridad y la gestión ética de algunos de sus funcionarios. La investigación ha revelado que se realizaron descuentos a los empleados municipales por conceptos de salud, pensiones y ARL (Administración de Riesgos Laborales), pero estos fondos no fueron consignados ni pagados a las respectivas entidades de seguridad social.
Lo más preocupante de esta situación es que el dinero descontado a los empleados no se encuentra en las cuentas de la administración municipal, generando serias dudas sobre el manejo y destino de estos recursos. Este descubrimiento no solo representa un caso grave de malversación de fondos, sino también una traición a la confianza de los trabajadores municipales, cuya seguridad social ha sido comprometida.
Según las investigaciones, se acumuló una deuda de cinco meses con los concejales, que asciende a $18.825.600, mientras que la deuda con los empleados de la administración municipal alcanza los nueve meses, sumando un preocupante total de $474.442.400. “cuatrocientos setenta y cuatro millones cuatrocientos cuarenta y dos mil cuatrocientos pesos” Estos hallazgos apuntan a una negligencia administrativa alarmante y posiblemente a un caso de corrupción que debe ser investigado de manera exhaustiva.
Este descubrimiento no solo exige una respuesta inmediata de las autoridades competentes para recuperar los fondos y asegurar el bienestar de los empleados afectados, sino también una revisión profunda de las prácticas administrativas en la municipalidad de Riosucio. La comunidad merece una gestión transparente y responsable, donde los recursos públicos se utilicen para el beneficio general y no para el enriquecimiento ilícito de unos pocos.
La situación en Riosucio es un llamado de atención sobre la necesidad de fortalecer los mecanismos de control y rendición de cuentas en las administraciones municipales. Es necesario que se tomen medidas para prevenir que este tipo de conductas fraudulentas se repitan en el futuro, garantizando así la integridad de los fondos públicos y la confianza de la ciudadanía en sus representantes.
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