Con algoritmos desarrollados en la Universidad del Rosario, la plataforma detecta las áreas en las que se está haciendo minería ilegal.
La extracción de minería ilegal es un problema que arrasa con ecosistemas naturales, que pone a trabajar a niños y que financia a grupos al margen de la ley. Pero detectarla para combatirla no es tan fácil.
El último informe que publicó la ONU sobre la explotación de oro de de aluvión en 2019 se basó en imágenes satelitales tomadas durante 2017 y 2018. Son imágenes desactualizadas que requieren una revisión manual que no facilita que el Estado ataque contundentemente los casos de daño ambiental y minería ilegal.
Esa revisión, que antes podía tardar dos años, ahora se puede hacer en minutos en Comimo, (Colombian Mining Monitoring) una plataforma desarrollada en Colombia que usa imágenes satelitales y aprendizaje automático para identificar las minas ilegales.
“Cada mes sale una nueva imagen satelital, la analizamos con el modelo y genera predicciones donde cree que posiblemente hay minería”, contó a Forbes Santiago Saavedra, el profesor de Economía de la Universidad del Rosario que encabezó el proyecto desarrollando los algoritmos de aprendizaje automático, tecnología que consiste en enseñarle a un computador a aprender de una tarea repetitiva. “Esto antes podía tomar meses y años”.
Esto se creció dos años atrás, cuando se ganaron un reto mundial de inteligencia artificial de Google, que les garantizó financiamiento y acompañamiento de parte de la compañía tecnológica. Así aumentaron la precisión del modelo de 78% a 90%.
Empezaron trabajando con imágenes del satélite Landsat8, de calidad bastante pixelada de 30mx30m; luego pasaron a Sentinel 2 con pixeles de 10mx10m, pero finalmente, el mapa tiene imágenes satelitales proporcionadas por Noruega, a través de su programa Nicfi, que les entrega una calidad de pixeles de 5mx5m.
“En Google nos ayudaron desde indicarnos cómo diseñar la plataforma para que fuera más fácil de usar hasta exigencias técnicas para que intentáramos con algoritmos distintos. El componente financiero nos permitió contratar personas y acceder a miles de horas de recursos computacionales de Google Cloud para poder tener lo que hoy tenemos”, explicó Saavedra a Forbes, quien en tres ocasiones antes de pandemia viajó con parte de su equipo a Silicon Valley y a otras locaciones para entrenarse con el Google Launchpad Accelerator.
Cualquier persona puede entrar a la plataforma de Comimo, que con inteligencia artificial aprende cómo se ve la minería ilegal en los mapas. Los títulos mineros autorizados por el Gobierno quedan con marcación morada y todo lo que esté fuera, podría estar captado por la minería ilegal, según la predicción. Esto lo lograron con una red neuronal que mira cada imagen y detecta las propiedades.
“Queremos que la gente se suscriba a la plataforma y pueda hacer validación. Se pueden escoger municipios de interés”, indicó Saavedra. “Las personas suscritas recibirán alertas mensuales de las nuevas posibles minas ilegales que aparezcan, incluso con marcas de reservas naturales y territorios de minorías étnicas”.
Aunque la plataforma fue desarrollada para territorio colombiano, sus creadores creen que a futuro los algoritmos pueden entrenarse para hacer detecciones en otros países mineros que también se enfrentan a la ilegalidad, como Perú, Venezuela y Chile.