El pasaje cuesta el doble pero las pangas las llenan en el camino denuncian pasajeros del transporte fluvial en el Atrato.

Tras una reunión con la DIMAR, empresarios del transporte fluvial y entes territoriales del departamento del Chocó, la alcaldía de Turbo, anunció la reapertura del muelle turístico y de pasajeros que sirve a este distrito.

“Empezamos despachando desde el muelle turístico del distrito de Turbo seis embarcaciones con tres destinos específicos, los cuales fueron Quibdó, Riosucio y Unguía”, dijo al inicio de septiembre Pedro José Díaz de Oro, vocero de la reactivación económica de Turbo.

En su efecto, la reactivación del transporte fluvial se reactivó y hasta la fecha, muchos pasajeros han logrado viajar hacia o desde las poblaciones ubicadas en el río Atrato y el Golfo de Urabá.

Más sin embargo conocimos de quejas de pasajeros denunciando que algunos conductores no estarían cumpliendo con los protocolos de bioseguridad durante los viajes.

“No es justo que a uno le cobren el doble del pasaje y que la panga termine llena porque van recogiendo pasajeros en el camino, no les importa sino la plata y ponen a la gente en riesgo” denunció un usuario de este transporte

Según las autoridades, el plan piloto contempla que las embarcaciones no pueden exceder el 60% de su capacidad, esto como una medida que busca que dentro de los vehículos los pasajeros conserven una distancia prudente para evitar el contagio del covid 19

Se entiende entonces que por esa razón el consto del pasaje se incrementó en algunos casos hasta más del 50%. Antes de la pandemia, viajar en una panga o lancha rápida de Quibdó a Riosucio, tenía un valor de $130.000 hoy esa misma ruta cuesta hasta $250.000, en cambio viajar de Riosucio Chocó a Turbo Antioquia y viceversa tenía un precio de $45.000 antes de la pandemia, ahora cuesta hasta $100.000

Este tipo de denuncias ya se habían reportado en la ruta Quibdó – Riosucio, donde según un usuario le contó al Radar que los conductores se ingeniaban artimañas para burlar los controles de la armada y en complicidad de otras embarcaciones traspasaban los pasajeros justo antes de pasar por los retenes de la fuerza pública.

Las medidas adoptadas por las autoridades solo buscan minimizar los riesgos de contagio y propagación del coronavirus, en este caso tanto, pasajeros como conductores están en la obligación de acatarlos y velar por su cumplimiento.

Cabe resaltar que en los últimos días hemos recibido quejas de algunos pasajeros que manifiestan que les ha tocado vivir una situación similares en el transporte terrestre.