TeleUCI es la alternativa planteada desde el HUN y la Universidad Nacional de Colombia (UNAL) para poner a disposición del país la fortaleza de su capital humano, altamente especializado, con la ayuda de tecnologías de comunicación remota que permitan conectarse en tiempo real con los profesionales de la salud en las regiones.
Para acercar esta atención virtual a las diferentes zonas del país, los médicos del HUN y de la Facultad de Medicina de la UNAL se han apoyado en los directores de las sedes de presencia nacional de la Institución, quienes han servido de puente con los hospitales locales.
“Se están finiquitando los últimos detalles del acuerdo con el Hospital de Sarare en Saravena (Arauca), con el Hospital San Andrés de Tumaco (Nariño) y con el de San Andrés Isla”, comenta el doctor Fernando Galván, vicedecano académico de la Facultad de Medicina de la UNAL, quien menciona que también se han hecho acercamientos con los hospitales de Soatá, Cocuy, Guicán (Boyacá), Málaga (Santander), Leticia (Amazonas), Buenaventura (Valle del Cauca) y Quibdó (Chocó).
Colombia, así como gran parte de los países del mundo, está buscando la forma de abastecerse de ventiladores para manejar los posibles casos de pacientes críticos por causa del nuevo coronavirus, los cuales se estimaba que podían ser cerca del 5 % del total de infectados; sin embargo, gracias a las medidas gubernamentales para contener el contagio la cifra actualmente ronda el 3 %.
“No obstante, contar con estos equipos para la atención de la crisis es solo una parte del manejo que se le debe brindar a los pacientes ante posibles complicaciones respiratorias”, advierte el doctor Jairo Pérez Cely, coordinador de la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del HUN, quien explica que esto debe complementarse con personal especializado en programar los equipos y brindar atención integral.
Y agrega que si bien el objetivo es ayudar, se puede ocasionar daño si no se usan bien los equipos, los cuales no se manejan por cualquier especialista, pues esto lo hacen los equipos médicos de intensivistas y de cuidado intensivo, enfermeras, personal de apoyo terapéutico y fisioterapeutas o terapeutas respiratorios. Además aclara que en este proceso el personal indicado hace un monitoreo de todos los sistemas y órganos del paciente y su evolución.
Por la complejidad de esta tarea es importante brindar apoyo y capacitación al talento humano que atiende la emergencia del COVID-19 en regiones en las que no se cuenta con estas especialidades y que se espera que empiecen a recibir los respiradores que está gestionando el Gobierno nacional para ampliar la capacidad de atención en UCI del país.
“Vamos a asesorar tanto en lo técnico de cuidados intensivos como en los casos en los que se tiene que remitir al paciente a un hospital de mayor complejidad o, incluso, si definitivamente el paciente no está respondiendo a todo lo que se está haciendo, determinar qué hacer desde el punto de vista ético”, comenta el doctor Pérez.
Así mismo esto hace parte de la expansión virtual en la que está trabajando el HUN en el marco de la crisis del coronavirus, fundamentada en la telemedicina, la teleasistencia y la teleconsulta para mejorar la atención de los pacientes y evitar su exposición al contagio al asistir a los centros hospitalarios.
