Estas palabras son de Nubia Montoya, una de las 3.566 víctimas beneficiadas por la alianza de esas dos instituciones y el Fondo educativo para las víctimas.
Con apenas 22 años de edad, y tras el asesinato de su esposo, Nubia Montoya se llenó de valor para continuar su proyecto de vida como madre cabeza de familia y cumplió su deseo de convertirse en una trabajadora social gracias al apoyo de la reparación a las víctimas.
Su relato así lo evidencia: “en el año 2013 estaba cursando mi carrera en la universidad en Medellín, pero no tenía recursos suficientes para pagar todas las materias. Ahí aparece la Unidad para las Víctimas que me ayudaron para acceder al fondo del ICETEX y gracias a este apoyo pude sacar mi carrera adelante”.
Nubia es una de las 3.566 sobrevivientes del conflicto en Colombia, quienes pudieron adelantar sus estudios superiores gracias a los créditos condonables del Fondo de Reparación administrado por el ICETEX, con recursos por 118 mil 600 millones de pesos.
El Fondo es financiado con recursos del Ministerio de Educación, la Secretaría de Educación de Bogotá y la Oficina de la Alta Consejería para los Derechos de las Víctimas, la Paz y la Reconciliación.
De las 3.566 personas atendidas en el último cuatrenio con estos créditos condonables, el 91 % han realizado estudios universitarios, el 7% tecnológicos y el 2 % técnicos. Por otra parte, el 93% de la población pertenece a los estratos 1 y 2, siendo el 74% del estrato 1.
Nubia, en representación de las 468 personas beneficiadas en Antioquia con este programa, compartió su testimonio de superación durante la Feria Universitaria y de Servicios para víctimas que se realizó en Antioquia, organizada por la Unidad para la Atención y Reparación Integral a las Víctimas y el ICETEX en Medellín -que rindió cuentas de su gestión-.
Ella recibió la condonación de la totalidad del crédito educativo, es decir, no tuvo que pagar nada, y el mismo beneficio fue recibido por otras personas que también sufrieron hechos victimizantes en medio del conflicto armado.
Para Javier Aguilar Gómez, profesional de la Unidad para la Reparación a las Víctimas, “a través de esta articulación interinstitucional con el ICETEX se brindan oportunidades a la población víctima para restablecer sus derechos y superar sus condiciones de vulnerabilidad. La educación superior es una forma de reparación y la Ley de Víctimas reglamenta que las universidades se deben vincular frente a estos procesos con las víctimas”.
El evento, realizado en la Institución Educativa INEM José Félix de Restrepo, sirvió para dar a conocer la oferta en educación superior de varias instituciones universitarias que, gracias a convenios con la Unidad para las Víctimas, ofrecen descuentos y beneficios en matrículas y semestres.
También se vinculó a la Feria el SENA, con oportunidades laborales a través de las bolsas de empleo de esta entidad, así como la Caja de Compensación Familiar Comfama.
De manera paralela, los jóvenes reconocidos como víctimas de desplazamiento forzado recibieron orientación por parte de la Unidad sobre los trámites para obtener la libreta militar de forma gratuita y la exención del servicio militar, en cumplimiento de una medida de la reparación integral.
Durante el evento, el presidente del ICETEX, Alejandro Venegas, destacó la alianza interinstitucional con la Unidad para las Víctimas: “Brindar oportunidades para la educación de los colombianos afectados por el flagelo del conflicto armado demuestra el compromiso del país en construir escenario y territorios de paz. Con estos fondos hemos contribuido a que los beneficiarios y sus familias tengan una transformación en sus vidas y sean parte del desarrollo de sus regiones en un escenario de posconflicto”.