Mediante información de inteligencia del Batallón de Infantería No 46 Voltigeros de la Décima Séptima Brigada, fue capturado en el municipio de Carepa, alias Brayan, quien presuntamente sería el hombre de confianza de Roberto Vargas Gutiérrez alias Gavilán del Clan del Golfo, uno de los más buscados del País.
El hombre oriundo de Montelibano (Córdoba), fue detenido por nuestros soldados por el delito de falsedad en documento público, después de que fuera interceptado en un control militar en donde presentó una cédula falsa para evitar ser detectado por los uniformados, porque al verificar sus antecedentes reales se conoció que tenía en su contra dos órdenes de captura vigentes, una por concierto para delinquir y otra por administración de recursos con fines terroristas; según las informaciones de inteligencia estaría próximo a convertirse en jefe de uno de una estructura de ese grupo armado organizado en la subregión de Urabá, por lo que su detención representa uno de los golpes más importantes a ese grupo ilegal.
El sujeto habría sido parte de las extintas autodefensas unidas de Colombia, pero después de desmovilizarse continuó delinquiendo y perdió los beneficios; lo vinculan al homicidio de un concejal del municipio de Tierralta (Córdoba) y viajó a Los Llanos Orientales para continuar con la expansión de esa estructura criminal en ese sector del País, después de que detuvieran a alias Carrillo en Villavicencio (Meta). Al conocer que las autoridades le seguían los pasos, regresó al Urabá antioqueño, donde se convertiría en un cabecilla de mayor rango.
Con esta detención, el comando de la Brigada adscrito a la Séptima División logra desvertebrar el subsistema económico, político y armado del Clan del Golfo, ya que al ser hombre de confianza de uno de los máximos cabecillas, tendría conocimiento de las rutas de narcotráfico, comercialización y transporte de hacia el exterior desde Urabá
